Lo debió escribir un gran hombre, de esos que se cuentan con los dedos de una mano y no uno de esos del montón - lastima no poder saber quien fue

A mi edad ya no me apetecen los amores a medias.
Las medias tintas, los medios sueños, los medios hechos.
Llegué a la edad de los inviernos en mis cabellos, dejé ausencias en verano y tomé las letras en mis otoños.
Pasaron por mi vida tantos labios que solo recuerdo el primero y el último.
Tomo más cafés que cervezas y duermo menos por insomnio que por desvelarme en noches de fiesta.
Mi rostro va adquiriendo cada día el cansancio de mis pasos y mis pasos llevan consigo la madurez de mi rostro.
Atrás quedó ese joven que le gustaban todas y que andaba con Cupido a las patadas.
Ahora sólo quiero un amor pacífico que no tenga miedo de declarar la guerra cada noche entre las sábanas.
Una mirada de mujer como el acompañamiento perfecto a dos tazas de café a las seis de la tarde y una mano que me acompañe por el último trayecto de mi vida.
Los amores efímeros los lancé por la ventana, dejé la puerta abierta para que entrara el que hará estancias.
Mi cubo de basura esta repleto de poemas añejos escritos algún día.
Ahora mis dedos llevan consigo un nuevo bolígrafo para escribir nuevas historias.
No quiero un amor a medias...
Que lo tomen los jóvenes, los que deben aprender a romperse a caer y levantarse.
Porque yo solo quiero un amor de esos que llevan el título de " Para siempre".

Lo guardo en la etiqueta de cosas de bruja porque el escrito de un ser así, no puede estar donde dicen algunos